En Grindermania. De el ligue metropolitano al sexo virtual, Juan Pablo Sutherland logra un influyente examen de la aplicacion sobre encuentros gay mas usada de la ultima plazo. Una utensilio que democratizo el yire aunque ademas redujo la habito rebelde de busqueda de sexo secreto en lugares publicos que desafiaba la logica moral de las grandes urbes.

A esta altura nunca es grandilocuente afirmar que Juan Pablo Sutherland (1967) seri­a el referente cultural y militante contemporaneo por ejemplo sobre la comunidad LGTBIQ chilena. A su ocasion, igual que pocos en el escenario intelectual hispanoamericano conjuga el activismo politico, la exquisitez literaria y la rigurosidad academica.

Autoproclamado gay y no ha transpirado comunista, desde esas dos identidades, Sutherland supo disponer el tronco en las travesi­as en tiempos que implicaba un riesgo sobre vida: la extendida noche de la dictadura pinochetista. Asimismo, acerrimo oponente sobre cualquier lo que suene a neoliberalismo, en los ultimos anos de vida tuvo la elocuente participacion en el transcurso que culmino con la derrota de Pinera. Desde 2018 esta se materializo en la faccion Marica: un carnaval sobre travas, tortas y locas que, con barroca comparecencia y banderas multicolores ocuparon el espacio publico santiaguino y no ha transpirado se enfrentaron a la furor carabinera reivindicando lo anormal sobre cuerpos distintos asi­ como almas travestis, lo andino y no ha transpirado lo punkie.

La misma coherencia sostuvo Sutherland desde la obra literaria en la cual confluyen diversos generos: el entrenamiento, la ficcion desplazandolo hacia el pelo la autoficcion y no ha transpirado la cronica. En libros sobre relatos tales como Angeles negros (1994) y Santo roto (1999), en manifiestos iconicos de estas sexualidades disidente como Nacion Marica: Practicas culturales asi­ como critica activista (2009) o en ejercicios de autobiografia como Papelucho gay en dictadura (2019), Sutherland no ha cesado de realizar la pansexualidad, el erotismo proletario, yonqui asi­ como marginal asi­ como la urgencia de iniciar la guerra intersectorial – que aune las luchas de clase, genero e identidad andina- como la unica posibilidad de redencion social y sexual.

Ronda nocturna

Con la publicacion de Grindermanias. De el ligue urbano al sexo virtual (Alquimia), Sutherland se consagra como el cronista de el erotismo marica sobre nuestro lapso al explorar la empleo de citas que nacida el 25 sobre marzo de 2009 parece haber transformado definitivamente y a grado global las practicas sexuales de la comunidad LGTBIQ.

Para ello desplazandolo hacia el pelo igual que seri­a habitual en su literatura, Sutherland pone el cuerpo, es decir, narra en primera alma y se desnuda literalmente igual como suele suceder en el decorado virtual sobre su objeto de estudio. Su escrito se presenta igual que “una bitacora critico-marica” que analiza la red geosocial contemporanea paradigmatica partiendo de las propias experiencias sobre sexo quimico contiguo a un enamorado con quien busca trios sexuales en Grindr desde sendos departamentos del barrio de Bella mirada. En esas descripciones sobre noches interminables plenas sobre concupiscencia salvaje y no ha transpirado cocaina, sobre intercambio de fotos intimas (algunas de estas cuales ilustran pedagogicamente el texto), transcripcion y capturas sobre monitor de chats que parecen salidos sobre una vieja revista porno, revelacion de morbos y no ha transpirado fetichismos sexuales, homoficciones, compulsivas busquedas de miembros enormes, Grindermanias… logra un sincero desplazandolo hacia el pelo fuerte retrato sobre epoca. Asimismo, Algunos de los meritos de el texto es conseguir delicadeza literaria en la vulgaridad de algunos pasajes de sordida vida marica.

El comercio de la carne

Caracterizado por el autor como “mercado sobre cuerpos”, “vitrina de carnes” fabricadas a la grado a partir de la estrategia de el fotoshop, Grindr supuso una “hiperbole espacial” que “virtualizo el viejo cruising, que conocimos la mayoria sobre los gays, maricas y locas por las proximidades de el ambiente metropolitano a lo largo de gigantesco pieza de el siglo XX y las primeros anos de vida de el XXI”. Y a la oportunidad, por primera ocasii?n en la biografia puso al sexo a la monitor de distancia y al inteligencia de la mano con un simple deslizamiento de dedos referente a el Smartphone, privatizo en la red el pretension colectivo asi­ como neutralizo la visibilidad callejera y el deambular sexual de las locas.

El libro analiza las formas en que, por un lado, Grindr funciono como un rayo exterminador que culmino – o redujo a nivel espectral- con una historica folclore rebelde de yire marica en busca de sexo desconocido en sitios publicos que desafiaba la logica panoptica asi­ como moral de las desmedidos urbes. “De la calle pasamos a la cabina de la red (ciber) y no ha transpirado luego al dormitorio de tu vivienda o departamento”. Por otro lado, paradojalmente, al mismo tiempo materializo la utopia sobre la visibilidad gay y no ha transpirado la distopia de la vigilancia policiaca a partir sobre su cualidad mas especifico: la geolocalizacion, la ubicacion sobre todxs las usuarios en un radio que el consumidor puede definir.

De el album familiar a la selfie

Apelando a la memorias, a la cultura y no ha transpirado a la clave historica, Grindermanias… alcanza reflexiones profundas con interesantes ramificaciones. Asi, en un apartado, una leyenda sobre la fotografia a vuelo sobre pajaro, Recursos le proporcionan pie al autor Con El Fin De pensar referente a las connotaciones simbolicas del pasaje de el clasico libro familiar a la selfie igual que archivo digital actual. Es decir, la selfie, formato impensable en otros siglos, parece dar con su correlato en el Zeitgeist actual: el triunfo de el individualismo, la idea del ligado neoliberal que se genera a si identico, que reniega del apego -la indagacion del apego nunca da la impresion hallar lugar en Grindr- y se halla existencialmente cada vez mas unicamente.

No desprovisto sobre humor, en el capitulo VII, el autor describe el menu sobre chicos que provee la empleo y que asemeja la novedosa forma sobre autoclasificacion sobre los sujetos que hubiera espantado a Foucault: el firme desplazandolo hacia el pelo especular que busca como objeto sobre afan a su misma tribu sobre gimnasio; el guarro asi­ como adepto al sexo; el antinormativx; el homonormativo que desprecia las afeminamientos; el 100 por ciento dini?mico o pasivo, dentro de otras formas de homoficcion.

Regresar al sauna

Algunas de estas superiores paginas son las que contraponen novedosas y viejas practicas eroticas: “Recorro el 282, sauna simbolico de la seccii?n gay de Santiago, y contemplo una cosa asi como Pompeya congelada sin sus habitantes… Merodeo por el primer vivienda desplazandolo hacia el pelo pienso en la abundancia sobre familia que conoci aca cuando terminaba la juerga intensa en las discotecas o fiestas privadas de Bella Vista… El segundo piso de el sauna continua vacio, la habitacion a donde viviamos las orgias se percibe mas grande, escasamente reconozco el lugar…”. No obstante Sutherland nunca cae en idealizaciones de el anterior ni en la simple tentacion de la nostalgia. Con el fin de el, callejeo desplazandolo hacia el pelo Grindr tienen potencialidades conservadoras asi­ como subversivas. Igual como afirma “las marchas del deseo son fragmentos sobre modelos biografias urbanas” desplazandolo hacia el pelo tan separado le sirven de escribir un verdadero manual de el erotismo gay, un ejemplar sobre historia sobre la colectividad, un deporte de memoria colectiva en el que muchxs se sentiran identificados y no ha transpirado la autobiografia de su existencia impresionante.

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